Las Edades del Hombre
Desde que en las catacumbas, los primeros cristianos comenzaron a plasmar su fe en imágenes, dibujos, figuras o pequeñas construcciones arquitectónicas, la relación entre la fe y el arte ha sido una realidad incuestionable. Salvado el obstáculo de los iconoclastas (siglo VII-VIII), el desarrollo del mismo se ha ido plasmando según la sensibilidad de cada época y de cada realidad.
La cantidad de elementos que jalonan nuestra geografía, tanto nacional como autonómica, hacen que la gratificación y el disfrute sensorial (y espiritual, también), se hagan realidad cuando visitamos algún templo, museo o exposición de la manifestación artística que sea. ¿A que sí? Posiblemente en esto estemos todos de acuerdo. Por eso, aunque solo sea para saber lo que vemos cuando sentimos esto, la cultura religiosa debería tener su sitio en nuestros centros de enseñanza.
Las Edades del Hombre es una fundación de carácter religioso, que tiene su sede en el Monasterio de Santa María de Valbuena, en la localidad vallisoletana de San Bernardo, y cuyo objetivo fundacional es la difusión y promoción del arte sacro de Castilla y León. Funciona desde el año 1988.
Hasta la fecha se han celebrado más de veinte exposiciones, con una asistencia aproximada de unos once millones de visitantes. El éxito y la valoración óptima del trabajo realizado en cada una de las sedes en las que se han desarrollado ha sido una constante.
Ahora vamos a tener la posibilidad de visitar y de comprobar lo que estoy diciendo, porque la catedral de la diócesis vecina de Plasencia, va a acoger desde mediados de mayo hasta finales de año de uno de sus trabajos.
La exposición llevará el nombre de “Transitus”, que dice relación a lo siguiente: a la vida de la ciudad donde se realiza la exposición como “lugar de encuentro”; al cambio de ciclo entre finales del XV y principios del XVI; al cruce de culturas entre América y Europa; a la obra de la Evangelización.
Serán ciento ochenta las obras que podremos contemplar en la exposición. Nuestra diócesis colabora en la misma con la presencia de ocho piezas de distintas localidades de nuestra geografía diocesana: Cáceres, Coria, Garrovillas, Ceclavín, Brozas, Herrera del Alcántara.
La exposición será un escaparate al exterior para nuestra región; una oportunidad para mostrar una cosa bien hecha y presentarnos como un pueblo con pasado, que vive el presente y prepara su futuro.